Poco más de 2 años han pasado desde la aprobación de la primera ley de iniciativa popular: La Ley de Conservación de la Vida Silvestre, que prohíbe la cacería deportiva en el país. Sin mebargo, aún no existe un reglamente que permita aplicarla y sus opostitores buscan cambiar elementos de la ley que regulan la cacería de control.