Tras la aprobación de una ley especial para pérdida de ciudadanía, el 9 de febrero del 2023, fueron desterrados 222 de los 245 presos políticos que mantenía el régimen de Ortega en Nicaragua.
El Régimen Ortega-Murillo les quitó la nacionalidad y los desterró a los Estados Unidos. Además el régimen mantiene la inhabilitación de por vida para el ejercicio de cargos públicos.
Con la reforma aprobada de inmediato esta mañana, cualquiera que se revele contra el régimen de Ortega, podría ser considerado traidor a la patria y por ello puede ser encarcelado y desterrado.
“El 8 de febrero del 2023 se ordenó la deportación inmediata de 222 personas sentenciadas por cometer actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación del pueblo, por incitar a la violencia, el terrorismo y el encendido, por lesionar los intereses supremos de la nación alterando la paz, la seguridad y el orden constirucional”, sentenció el Tribunal de Apelaciones en Managua.
Esta es la información desde Nicaragua.