Las costumbres, en su mayoría son dirigidas por los bädi (curanderos o curanderas) adultos, pero también es cierto que en cualquier parte del planeta nacen niños y niñas que vienen con un don, y este don es dado por los elementos. Los abuelitos y abuelitas saben y conocen el alma de los que han nacido.
La nota llega desde Radio Huayacocotla.