El pasado 8 y 9 de abril se celebró en Tegucigalpa, Honduras, la novena cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la que reunió a 11 jefes y jefas de Estado y de gobierno en torno a temas clave para la integración, el desarrollo y la cooperación regional.
En sus respectivas alocuciones las y los presidentes destacaron trabajar por una cooperación tangible en materias de educación, energías limpias y justicia social, así como migración, integración económica promoviendo espacios de diálogo y concensos.
En el marco de esta novena cumbre, 30 de los 33 estados miembros firmaron la Declaración de Tegucigalpa, con excepción de Nicaragua, Argentina y Paraguay.
Esta declaración presenta 8 puntos en los que destacan el compromiso con fortalecer este organismo que integra a los países de la región; resaltar la vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, que rechaza las medidas imposición de medidas coercitivas unilaterales y contrarias al Derecho Internacional; y refrendar el firme respaldo a la República de Haití, para restablecer un entorno de seguridad humana para la normalización de la situación política, económica y social, con un enfoque integral de desarrollo.
En esta cumbre, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, entregó la presidencia pro témpore del organismo a su homólogo, el colombiano Gustavo Petro, quien abogó por profundizar la ayuda y colaboración mutua desde este espacio de encuentro regional.