La sentencia condenatoria en contra de los estudiantes Cesario Padilla, Moisés Cáceres y Sergio Ulloa por el delito de usurpación, es la máxima expresión de la dictadura que gobierna el país. Y la Universidad Nacional Autónoma de Honduras la replica con sus alumnos dicen analistas. La criminalización del estudiantado universitario incluye el uso del derecho penal y la apertura de procesos criminales contra quienes protestan. También significa la descalificación y la represión directa con policías, militares y guardias privados de seguridad.
Iolany Pérez tiene el reporte desde Radio Progreso en Honduras.