Este es uno de los dos países en toda América Latina donde no se reconoce la existencia de los medios comunitarios. La idea de que las frecuencias son un bien para explotar comercialmente y no un bien público de la ciudadanía, les ha cerrado las puertas a quienes quieren hacer comunicación sin fines de lucro.
Pero esto no quiere decir que no haya iniciativas de radio hecha por y para las comunidades que son conscientes de que la comunicación es un derecho que les pertenece.
Foto: Orotina Online